Lava los calabacines y córtalos por la mitad a lo largo. Con una cuchara, vacía suavemente la pulpa de los calabacines, dejando una pequeña capa de carne alrededor de los bordes. Pica finamente la pulpa que has extraído.
En una sartén grande, calienta una cucharada de aceite de oliva a fuego medio. Agrega la cebolla picada y el ajo, y sofríe hasta que estén dorados y fragantes.
Añade la carne picada a la sartén y cocínala hasta que esté dorada y bien cocida. Añade la pulpa de calabacín picada y el tomate triturado. Cocina por unos minutos más hasta que la pulpa de calabacín esté tierna y el tomate se haya reducido. Condimenta con sal, pimienta y las especias de tu elección. Remueve bien todos los ingredientes.
Precalienta la freidora de aire a 180 °C durante unos minutos.
Rellena las mitades de calabacín con la mezcla de carne que has preparado. Espolvorea el queso rallado sobre los calabacines rellenos.
Coloca los calabacines rellenos en la canasta de la freidora de aire. Rocíalos con una cucharada de aceite de oliva.
Cocina los calabacines rellenos en la freidora de aire a 180 °C durante aproximadamente 12-15 minutos, o hasta que estén tiernos y el queso esté dorado y burbujeante.
Retira los calabacines rellenos de la freidora de aire con cuidado, ya que estarán muy calientes. Deja que se enfríen un poco antes de servir.